El monóxido de carbono (CO) es un gas incoloro, inodoro y altamente tóxico. Se produce cuando combustibles como la gasolina, el fueloil, el propano, el queroseno, el gas natural, el carbón y la madera no tienen suficiente oxígeno para arder correctamente. El CO podría representar una amenaza mortal para usted y su familia. Si sospecha que hay CO en su casa, salga y llame al 911 inmediatamente.
Si sospecha de intoxicación por CO:
- Saque a todos del edificio y llévelos a tomar aire fresco inmediatamente.
- Llame al 911 o a ayuda médica de emergencia.
Síntomas de intoxicación por CO:
- Enfermedad repentina parecida a la gripe
- Mareos, dolor de cabeza, confusión, somnolencia.
- Náuseas o vómitos
- Latidos cardíacos palpitantes o agitados
- Inconsciencia
Para prevenir la intoxicación por CO:
- Esté alerta a los síntomas de intoxicación por CO.
- Instalar y mantener alarmas de CO y reemplazarlas cada cinco a siete años.
- Nunca opere motores de combustión interna en interiores.
- Nunca utilice parrillas de carbón en interiores.
- Haga revisar periódicamente todos los aparatos que queman combustible, conductos de humos, respiraderos y chimeneas.
Alarmas de CO
Asegúrese de que su casa esté equipada con alarmas de CO que funcionen.
- En casas de dos pisos, instale al menos una alarma en cada nivel.
- Para mayor seguridad, considere instalar alarmas en cada dormitorio.
- En sótanos, instale una alarma en la parte superior de las escaleras.
- Cambie las pilas de la alarma al comienzo del invierno y luego cada seis meses.
- La vida útil de un detector de CO es de unos siete años. Un detector que emite un pitido intermitente cada 30-60 segundos podría estar al final de su vida útil.
- Las alarmas que emiten un pitido continuo podrían indicar la presencia de CO. Cuando suene sin pausa, saque a todos y llame al 911.